El ex futbolista brasileño Romario, campeón mundial con Brasil en 1994, aprovechó el lanzamiento de una biografía suya para negar, con mucha ironía, varias de las informaciones sobre problemas financieros y judiciales que lo tienen nuevamente en la portada de los diarios.

"No fui yo quien mató a Michael Jackson ni quien trajo la gripe A a Río de Janeiro. No maté a nadie ni le robé nada a nadie. Parece que me convertí en el villano de Brasil y no lo soy", dijo el famoso ex atacante en declaraciones que concedió la noche del lunes a periodistas durante el lanzamiento del libro "Romario".

El otrora futbolista, que la semana pasada pasó una noche en la celda de una comisaría de policía por no haber pagado la pensión alimenticia de dos de sus hijos, se refirió así a los varios escándalos que lo rodean y que acaparan titulares de la prensa amarilla.

Además de los problemas con su ex mujer, Mónica Santoro, por el atraso en el pago de la pensión alimenticia, Romario está siendo señalado como uno de los inversores en una red financiera irregular en el modo de "pirámide" que quebró y que dejó a varias personas en la bancarrota.

El jugador, según versiones de prensa, estaría con una millonaria deuda para cubrir sus obligaciones en la supuesta red, que la policía investiga debido al asesinato de una de las personas que habría hecho elevadas inversiones en la "pirámide".

Romario también enfrenta varios procesos en diferentes tribunales y ya fue condenado a pagarle una indemnización al ex seleccionador brasileño Mario Lobo Zagallo por daños morales.

"Hay cosas que son verdades. Pero el 80 por ciento no lo es. Las cosas que la justicia considere que tengo que pagar, voy a pagarlas", afirmó.

Romario no se refirió en especial a ninguno de los procesos, pero admitió estar con problemas financieros.