La emocionante última jornada del Torneo Clausura argentino podría jugarse sin público, debido a un posible anuncio por parte del gobierno trasandino que levantaría una emergencia sanitaria por el avance sostenido de la gripe AH1N1.

Esta situación ha mantenido en alerta a la Asociación de Fútbol Argentino (AFA), que espera el anuncio de la presidenta Cristina Fernández para saber si Vélez Sársfield y Huracán, exclusivos postulantes al título, podrían jugar con o sin público su respectivo duelo el 5 de julio, tras las elecciones legislativas de este domingo.

Fuentes del órgano rector del fútbol trasandino indicaron que su presidente, Julio Grondona, se inclinaría por la disputa de los partidos a puerta cerrada.

De avanzar Estudiantes de La Plata en la Copa Libertadores, la (Conmebol) adoptaría similar decisión, indicó el secretario de esta entidad, Eduardo Deluca, al matutino La Nación.

"La situación es diferente a lo que pasó en México. Cuando los equipos mexicanos se fueron de la Libertadores, la Concacaf ya había decidido jugar a puerta cerrada y el gobierno local ya había decretado la emergencia. Y eso en la Argentina todavía no pasó", comentó el dirigente.

La situación sanitaria es "muy seria" ante el avance de la influenza humana al otro lado de la cordillera, denunciaron en las últimas horas varias organizaciones del sector, que afirman que la cantidad de personas infectadas "es sustancialmente mayor" a la cifra oficial y los hospitales están "al borde del colapso".