La rusa Maria Sharapova (102º) regresó a Roland Garros, en el que este lunes su hombro derecho pasó la prueba y venció a la bielorrusa Anastasiya Yakimova (64º), por 3-6, 6-1 y 6-2.

Jugando con un vendaje especial en el hombro y sobreviviendo después de ceder la primera manga tras ceder tres veces su saque, nacida en Nyagan salió airosa de su primera presentación, tras haberse perdido las dos últimas versiones del Grand Slam.

Yakimova terminó llamando al fisioterapeuta por unos problemas en la parte baja de su espalda, y Sharapova saludando al público con la mejor de sus sonrisas.

Sharapova no pudo disputar el pasado año el Abierto de Estados Unidos ni el de Australia esta temporada, y ha hecho su debut individual la pasada semana en Varsovia, donde rompió su inactividad para recuperarse del hombro operado hace nueve meses, y donde alcanzó los cuartos de final.

Maria Sharapova sigue en competencia en el Grand Slam parisino. (Foto: EFE)

Animada porque un título en París significaría para ella haber ganado ya los cuatro Grand Slam, Sharapova comentó que no sintió dolor, pero que tampoco intenta forzar al máximo, y que en cierta manera, ahora comienza una nueva carrera para ella.

"Después de una operación no voy a salir allí e intentar 50 golpes ganadores y hacer aces a diestro y siniestro", comentó, "He pasado casi tres meses sin tocar una raqueta, ha sido todo muy complicado y he tenido que apartar muchas cosas de mi vida".

"Realmente no tengo unas expectativas claras. Es la primera vez en mi carrera en la que puedo decirlo así, no sé como me van a ir las cosas y como va a funcionar todo esto", añadió.