Tras un fin de temporada que le reportó cinco medallas en copas mundiales, cuatro récords sudamericanos y dos Top Ten en el ranking global, la nadadora chilena Kristel Köbrich se puso como meta aspirar a una medalla en los 1.500 metros del próximo Mundial de Roma

En el Campeonato Mundial en Roma (26 de julio al 2 de agosto), la pupila del DT argentino Daniel Garimaldi tiene proyectado nadar los 800 y los 1.500 metros en piscina, además de los 10 kilómetros.

"Eso es lo seguro en cuanto al Mundial, pero dependiendo de cómo vayamos desarrollando nuestro trabajo, no descartamos nadar además en Roma los cinco kilómetros de aguas abiertas y alguna prueba corta en piscina", explicó Köbric, quien adelantó sus objetivos.

"Ya fui finalista en los 1.500 en el Mundial de Melbourne 2007 (fue séptima), por lo que en esa distancia quiero pelear entre un tercero y un quinto lugar, sin descartar para nada una medalla. Y en 800 mi objetivo es buscar la final para las ocho mejores. En aguas abiertas, habrá que pasar primero por las Copas del Mundo, que nos permitirán trabajar muchas cosas que aún faltan", comentó.

La fondista analizó el año 2008: "No se trata de masoquismo, pero los errores que cometí en Beijing me tenían que ocurrir para poder hacer el click. A otros les pasa en un Nacional. A mí me pasó en Beijing. Luego de esos errores, que me enseñaron mucho, fui a dos Copas Mundiales de aguas abiertas y quedé primera y segunda...Pero no es ganar y decir, ya, estoy lista, ahora hago lo que quiero en aguas abiertas...No. Esto no funciona así", explicó.

"En aguas abiertas vale más la experiencia que la natación en sí misma y esa experiencia yo la estoy construyendo torneo a torneo, y en cada entrenamiento. Lo que me deja feliz este año es que fue una temporada muy mágica, llena de sensaciones distintas, a veces duras, a veces alegres. Fue un año exitoso, redondo y muy completo", agregó.