Por José Antonio Prieto, desde Venezuela.

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Otra vez se ganó. A la frase se le podría agregar, de visita, dando vuelta el resultado y en el minuto final. Son detalles muy importantes, que comienza a manejar este equipo.

Lo claro es que ya se reflejan en la cancha un par de conceptos: salir a ganar tomando riesgos, orden táctico, gran despliegue físico, sentido colectivo y al final calidad individual.

No mencioné los tradicionales "actitud", "garra", "entrega" que muchas veces se utilizan para justificar la falta de categoría o calidad profesional.

Los triunfos ante Bolivia y Venezuela son para celebrar por un rato no más, no hay que ir a sacar pasajes a Sudáfrica, pero sí averiguar cuánto cuestan. El camino todavía es largo, y pese a las buenas señales, por delante quedan muchos partidos y rivales diversos en un torneo con muchos candidatos.

En el análisis individual, el que está por encima de todos es Alexis Sánchez. Si consigue crecer de acuerdo a las necesidades, Chile tendrá un gran argumento para soñar. En el uno contra uno, e incluso en el dos contra uno es a veces imparable. Su categoría tiene que aprovecharla en los metros finales.

Un poco más atrás y en orden, vienen Medel, Suazo, Bravo, Carmona, Jara y Fuentes. Son los más firmes en cuanto a regularidad y rendimiento.

Después hay un grupo que empuja por ganarse la titularidad, Estrada, Beausejour, Mark Gonzalez, Cereceda, Droguett y Pedro Morales.

Sin dudas que el grupo de los "fijos" (hay que agregar a Matías Fernandez) ya está avanzado y no sólo se hace fuerte dentro de la cancha. Ha tomado posiciones en forma pública en relación a compañeros descarriados y comienzan a surgir los líderes y eso también ayuda.

Hay tiempo para prepararse para los partidos de septiembre, pero hay temas por afrontar: la llegada de Valdivia, tal vez de Tello y algún otro de los que cumplieron castigo; y definir las situaciones de Vidal e Islas. El caso de estos últimos es muy complejo, pero con aristas especiales por su juventud y formación personal. Se equivocaron y feo para los códigos del fútbol, pero hay que realizar un intento y sumarlos. No será fácil.

No hay que dormirse y ya hay que pensar en las materias a aprobar en el corto plazo.

Primero, jugar con autoridad en Santiago frente a Brasil y Colombia. Segundo, seguir en posiciones de clasificación directa al Mundial. Esta debiera ser la tarea más dura en este proceso de Bielsa. Sí se consigue ese paso, hay que comenzar a mirar agencias de viajes para el 2010.