La nadadora chilena Kristel Köbrich se mostró muy satisfecha este lunes por haber conseguido el fin de semana la clasificación olímpica en aguas abiertas en el torneo selectivo efectuado en Pekín y aclaró que desistirá de nadar los 400 metros, su prueba más débil en beneficio de las competencias de alta resistencia.

"Me abocaré a los 800 metros y a las aguas abiertas. Los 400 definitivamente no los nadaré. Y esto se debe a que el entrenamiento para 800 me sirve también para aguas abiertas, pero no tiene nada que ver con un trabajo de velocidad, que es el que tendría que hacer si quisiera nadar los 400", comentó.

"Esa prueba queda ahora descartada, pues no quiero romper mi ritmo de trabajo", agregó en su paso por Santiago.

La chilena volverá a Córdoba (su ciudad de residencia) y habló de la competencia que le permitió clasificar a Pekín por segunda vez. "La diferencia la hice yo misma, porque estuve mucho más atenta que cuando nadé en Sevilla", dijo.

"Fue duro, pero yo enfrenté la carrera de manera distinta y logré un muy buen resultado", comentó la deportista nacional.

La especialista, clasificada ya para los Juegos Olímpicos en sus pruebas de piscina (400 y 800 metros libre), se transformó así en la única especialista de la delegación nacional seleccionada para competir en dos modalidades de su deporte. "Ello me llena de orgullo, realmente estoy contentísima, porque esto me demuestra que voy por muy buen camino en aguas abiertas", comentó.

Kristel Köbrich se concentrará en Córdoba, hasta la fecha en que deba viajar a los Juegos Olímpicos junto a la delegación nacional. (Prensa ADO)