El sueco Sven Goran Eriksson, entrenador de Inglaterra, lamentó la eliminación de su equipo en cuartos de final de Alemania 2006 tras caer por 3-1 en definición a penales ante Portugal, y señaló que la expulsión de Wayne Rooney en el minuto 61 resultó clave en el resultado final.

"Comenzamos muy bien y teníamos controlado el partido, pero la expulsión (de Rooney) nos llevó a los penales. Aun así, con un hombre menos seguimos jugando bien. Pero son demasiados penales fallados, porque su portero estuvo muy acertado", señaló

Aunque dio a entender que la tarjeta roja al jugador de Manchester United fue exagerada, el DT reiteró que la inferioridad numérica fue clave para que Inglaterra no pudiera cerrar el partido a su favor en el tiempo reglamentario.

"No puedo estar totalmente de acuerdo con la expulsión, porque hay dos jugadores que le hacen falta a Rooney. Pero quiero ver la jugada antes de opinar, porque el árbitro estaba muy seguro", indicó.

"Todo se estaba desarrollando según se planteó. Controlamos muy bien y creamos oportunidades, si hubiésemos estado con 11, tal vez podríamos haber puesto a Peter Crouch en los últimos 25 minutos. La expulsión lo cambió todo, pero siguieron jugando muy bien y eso es muy difícil", añadió.

Respecto de la sustitución de David Beckham en los primeros minutos del complemento, Eriksson explicó que el volante de Real Madrid "recibió una patada en el primer tiempo, fue tratado en el descanso y lo intentó en la segunda parte", pero no pudo seguir.

El estratega, que este sábado con la eliminación del equipo terminó su relación laboral con la escuadra inglesa, señaló que merecieron mejor suerte en Alemania.

"Estaba seguro que con estos jugadores podía haber llegado a la final. Lucharon mucho, pero increíblemente hemos perdido otra vez por los penales. Lo siento por la afición que nos apoyó", sostuvo.

"No se pueden entrenar más de lo que lo hemos hecho los penales, pero fallar tres de cuatro es demasiado. Ricardo hizo buenas tapadas, y lo siento por el equipo y los aficionados. Este equipo necesitaba una semifinal o una final y lo podíamos haber logrado", comentó

En su despedida de la selección, Sven Goran Eriksson señaló que "no estoy aliviado, sino triste y enojado, porque no continuamos. No se puede echar las culpa al árbitro. Salimos porque fallamos nuestras ocasiones", finalizó. (EFE)