La prensa turca calificó como severo e "inhumano" el castigo impuesto por la Comisión de Disciplina de la FIFA a la selección Turquía, que obligará al equipo a jugar sus próximos seis partidos como local sin público y en un territorio neutral, debido a los incidentes ocurridos en Estambul en el repechaje contra Suiza rumbo al Mundial de Alemania 2006.

"Es inhumana. La FIFA dijo claramente a Turquía: no queremos nada más de ustedes", señaló en un titular con grandes caracteres el diario Hürriyet.

Esta afirmación fue refrendada por el rotativo Sabah, que tituló con la frase "Esto se llama expulsión", en referencia a las posibilidades de Turquía en las clasificatorias para la Eurocopa 2008, en la que deberá enfrentar como parte del Grupo C a Grecia, Noruega, Bosnia-Herzegovina, Hungría y Moldavia.

Al contrario de los anteriores, el diario Vatan apostó por una reflexión sobre los hechos y sus consecuencias, al asegurar que la sanción de FIFA "constituye una buena ocasión para restablecer el orden en el fútbol turco, salpicado de escándalos".

"A nosotros los turcos no nos gusta hacer autocrítica, pero hoy no podemos evitar hacerla", comentó el editorial de la sección de deportes.

La FIFA decidió el martes que Turquía juegue los próximos seis partidos oficiales como local a puerta cerrada, y en un terreno neutral que se encuentre en otro país afiliado a la UEFA y a una distancia mínima de 500 kilómetros de la frontera turca.

El castigo respondió al enfrentamiento entre los integrantes de la selección turca y el de Suiza al término del duelo de repechaje para el Mundial, que favoreció a los helvéticos.

La Comisión Disciplinaria de la FIFA, que también castigó a cuatro integrantes del equipo turco y a dos del suizo, determinó además que los costos organizativos de esos seis partidos serán asumidos por la Federación de Turquía, que tendrá que pagar además una multa de 200.000 francos suizos (154.000 dólares, 81 millones de pesos). (EFE)