Jugadores de la liga italiana protestarán contra el racismo en el fútbol
Los futbolistas del calcio decidieron manifestarse en contra del racismo que prolifera entre las barras de los equipos italianos, demorando en cinco minutos el inicio de los partidos de esta semana.
Los jugadores del fútbol italiano se manifestarán en contra del racismo que se observa en los simpatizantes de los clubes de la Serie A, demorando en cinco minutos el inicio de los duelos a disputarse esta semana en el calcio.
De esta forma, los encuentros que se jueguen entre este martes 29 de noviembre y el próximo domingo 4 de diciembre en la Copa Italia y la Serie A comenzarán con cinco minutos de retraso, como protesta por los actos racistas en los campos de fútbol, el último de los cuales se produjo en el duelo entre Messina e Inter de Milán.
Asimismo, los jugadores saltarán al terreno de juego con una pancarta, que llevarán hasta el centro del campo, en la que figurará la frase "No al racismo".
Ambas medidas fueron adoptadas por la Federación Italiana de Fútbol (FIGC), ante lo acontecido al defensa marfileño Marc André Kpolo Zoro, de Messina, objeto de coros racistas por un parte de los seguidores de Inter de Milán.
A los 65 minutos, cansado de los cánticos, Zoro cogió el balón entre las manos y se dirigió hacía la banda donde estaba el cuarto árbitro para solicitarle que parase el partido.
En su camino hacía la banda, a Zoro se le acercaron los interistas Adriano, brasileño, y Obafemi Martins, nigeriano, ambos también de raza negra, quienes intentaron calmarle y, sobre todo, para que cambiara su intención de abandonar el campo.
Zoro, tras un par de minutos, decidió volver al terreno de juego, con lo que continuó el partido.
"He recibido insultos en muchos partidos del campeonato, pero ya hoy (domingo), y en nuestra casa, no podía más. Los jugadores interistas me hicieron ver que de seguir en mi postura el partido se tenía que volver a jugar, que iba a haber problemas, además de pedirme disculpas en nombre de sus aficionados, y decirme que me entendían bien, que ellos lo habían sufrido en otras ocasiones y que irían ellos a pedirles que se callaran. Por ello, decidí seguir", dijo
Zoro al término del encuentro.
Asimismo, Inter de Milán, por medio de su presidente, Giacinto Facchetti, solicitó excusas públicas a Zoro por el pésimo comportamiento de su afición.
Por su parte, la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) decidió abrir una investigación sobre lo acontecido en Messina.
El caso ha levantado un gran revuelo en Italia, donde la mayoría aplaude el gesto de Zoro, pero se abrió un debate sobre si es necesario o no, ante este tipo de comportamiento racista, parar los partidos.
Marcello Lippi, seleccionador nacional italiano, ha considerado este episodio de racismo como "insultos contra natura".
"Existe una sola raza, y es la de los humanos", dijo el técnico. (EFE)