La tenista belga Kim Clijsters, actual número siete en la clasificación de la clasificación de la WTA, no tendrá que ser de nuevo operada de la muñeca izquierda, aunque su médico confirmó que estará seis semanas sin jugar para poder recuperarse de la lesión que sufrió durante el torneo de Hasselt (Bélgica).

Clijsters tuvo que abandonar el pasado sábado 2 de octubre la semifinal del certamen frente a la rusa Elena Bovina a causa, según un diagnóstico preliminar, de una inflamación y una rotura parcial de un tendón de la misma muñeca de la que fue operada el pasado 12 de julio.

Francis Lemmens, el médico personal de Clijsters, descartó en parte, en el sitio en internet de la tenista, el diagnóstico inicial de los médicos al decir que no se ha detectado rotura alguna.

"Los exámenes médicos más exhaustivos dejaron claros que se trata de una inflamación de un tendón, que provoca fricciones constantes con los demás tendones y, por lo tanto, también mucho dolor, pero afortunadamente no hay ninguna rotura", explicó Lemmens.

"Por eso Clijsters por el momento no tendrá que ser operada, pero sí tendrá que descansar unas seis semanas, llevar un vendaje, tomar antiinflamatorios y seguir un programa ligero de recuperación para que pueda volver a la competición a mediados de enero en el Abierto de Australia", añadió el médico.

Lemmens insistió en que Clijsters ya no experimenta ningún problema en el tendón operado, aunque "el tejido de la cicatriz restante todavía podría provocarle molestias".

La antigua número uno de la WTA no había disputado ningún partido desde el 5 de mayo, cuando se produjo la primera lesión, y no había notado molestias hasta que se tuvo que retirar en la semifinal del torneo de Hasselt. (EFE)