En una concurrida conferencia de prensa, Nicolás Massú expresó sus impresiones después de transformarse en el primer deportista chileno en consagrarse con dos medallas olímpicas de oro y señaló que cuando se desplomó para celebrar el triunfo tuvo múltiples sensaciones.

"Cuando caí al suelo, me acordé de todo el esfuerzo que había hecho en mi vida, y que de alguna manera conseguí lo que buscaba y al final salió, y pensé en la gente que está cerca de mí", dijo aún en medio de la emoción.

El tenista chileno señaló que "lo primero que pensé fue lo nervioso que estaba cuando sacaba por el partido. Se me pasaron muchas cosas por la mente: ganar la olimpiada, la historia, y partí con doble falta y me puse más nervioso", narró el doble medallista chileno.

"¿Si lo logro dimensionar? Es como raro. Es un sentimiento distinto. Es el trofeo más importante de mi carrera, lejos, no se compara con ningún torneo, ni con ningún partido", dijo en relación con los demás torneos ganados.

"Es algo que no se puede creer. Son dos medallas de oro en menos de 24 horas, y espero el día de mañana saber lo que realmente hice y quiero hablar con mi familia y mis amigos. Deben estar locos, felices", dijo Massú, quien "por cábala" no fue acompañado por sus más cercanos en el periplo ateniense.

La primera raqueta nacional realizó un gran esfuerzo para imponerse en la final ante el estadounidense Mardy Fish por 6-3, 3-6, 2-6, 6-3 y 6-4 en un encuentro que se extendió por cuatro extenuantes horas, pero aclaró que la posibilidad de ganar el oro le permitió sobreponerse y luchar hasta el final.

"Un deportista siempre tiene dolores y uno nunca está bien del todo. El desgaste que hacemos es sobrenatural y esta semana jugué dos partidos, y estaba cansado, pero pensé 'estás jugando la final de los Juegos Olímpicos y quizás nunca más estés acá'", aclaró el viñamarino.

"Era el momento de dejar todo en la cancha y se lo comenté al doctor (Alejandro) Orizola: 'me da lo mismo si quedaba parado un mes, pero yo quería ganar acá, me daba lo mismo'", expresó.

"Como deportista uno siempre tiene miedo, se pone nervioso, piensa cosas positivas y negativas y se te pasan muchas cosas por la cabeza en muy poco tiempo", añadió Massú.

Respecto del juego que lo consagró como héroe del deporte nacional, el viñamarino señaló que tenía confianza en obtener un triunfo, pero que durante el encuentro debió soportar demasiados aspectos en contra para imponerse.

"Cuando entré a la cancha, pensé que iba a ganar, pero estaba luchando contra todo lo que pasó hoy (domingo), lo que pasó ayer (sábado), sin haber dormido casi nada, y sabía que él estaba fresco".

"El primer set lo gané bien, pero de ahí en adelante no tenía fuerzas para moverme, porque soy un jugador que necesita mucha explosión y necesito moverme muy bien, y estaba desgastado", relató el chileno.

En relación con el constante apoyo del público Massú tuvo palabras de agradecimiento.

"La gente siempre me apoyó. No sólo en la final, sino que durante toda la semana, incluso me sorprendió que me quisieran como si yo fuera un griego. La gente estaba en todos los partidos a mi favor y eso me ayudó mucho, además de toda la delegación chilena que vino", dijo el tenista, quien agradeció el apoyo de sus compañeros en el representativo chileno.

"De repente cuando estaba tan mal, ver a todos los deportistas... porque no faltaba ninguno apoyándome y gritándome. y eso es algo que me fortaleció, porque no los podía defraudar ni a ellos ni a mi", concluyó.