El tenista chileno Fernando González aseveró que será capaz de recobrar las fuerzas y el ánimo de cara a sus dos trascendentales presentaciones de este sábado en los Juegos Olímpicos, y prometió que peleará por la medalla de oro en el dobles junto a Nicolás Massú, y por la presea de bronce en la competencia individual.

Luego de perder su duelo por semifinales ante el estadounidense Mardy Fish por 6-3, 3-6 y 4-6, el jugador de La Reina se mostró decepcionado y triste, pero aclaró que de aquí al sábado logrará recuperarse para disputar el tercer escalón del podio ateniense.

"Lo de hoy (viernes) tiene que pasar. Estoy muy triste pero tengo un día entero para recuperarme anímicamente y venir a pelear otra vez mañana (sábado)", aseveró.

El pupilo de Horacio de la Peña agradeció el constante apoyo del público nacional tanto en Grecia como en Chile, y envió un claro mensaje de cara al encuentro de este sábado ante el estadounidense Taylor Dent.

"Que se queden tranquilos porque voy a dar lo mejor de mí, ya que tengo mucho que seguir dando todavía. Mañana (sábado) va a ser otro día y voy a estar listo para pelear y para seguir adelante", indicó.

González señaló que en la final de la competencia de dobles, que disputará junto a Nicolás Massú ante los alemanes Nicolas Kiefer y Rainer Schuettler, la compañía y el apoyo del viñamarino serán fundamentales para mantener la fortaleza y pelear por el oro.

"Va a ser importante porque 'el Nico' es un gran compañero, gran tenista y una gran persona, siempre nos vamos a levantar el uno al otro y él debe estar muy contento de estar en dos finales. Así que por mi parte mañana va a ser otro día y esto ya va a ser historia, y he de estar listo para volver y dar la pelea", puntualizó.

Respecto de la torcedura en el tobillo derecho, que afectó su desempeño ante Mardy Fish e hizo temer en un posible retiro, la segunda raqueta nacional señaló que sólo fue una molestia momentánea y que estará en condiciones de volver a la cancha este sábado.

El jugador indicó que no es la primera vez que sufre una torcedura de esa magnitud y recordó otra oportunidad en la que "en el momento me dolió mucho y al otro día me dolía un poco, pero podía jugar".