Demostrando que el tenis chileno atraviesa por un excelente momento, Fernando González (21° de la ATP) ratificó todas sus condiciones con una trabajada victoria ante el francés Sebastien Grosjean (12°), a quien superó por 6-2, 2-6 y 6-4 para instalarse en las semifinales de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.

En un nuevo desafío de primer nivel luego de dejar en el camino al estadounidense Andy Roddick (2°), el jugador de La Reina volvió a demostrar toda su calidad sobre el cemento ateniense, esta vez ante el mejor tenista francés de la actualidad.

La segunda raqueta nacional tuvo un gran comienzo y luego de desnivelar con un quiebre en el quinto game, se volvió invencible sobre la pista del court 1 y ganó todos los juegos restantes, para quedarse con el primer set por un categórico 6-2 en sólo 34 minutos.

Al mismo tiempo que Nicolás Massú hacía de las suyas ante el español Carlos Moyá, Fernando González dominaba sin contrapesos el encuentro, pero un rompimiento de Grosjean en el cuarto juego marcó el trámite del segundo parcial.

González no pudo recuperarse y además cedió su servicio en el último capítulo, posibilitando el triunfo del representante galo por 6-2.

Pero los jugadores chilenos dejaron en claro que no pensaban abandonar la competencia griega con las manos vacías, y la segunda raqueta nacional supo reaccionar en el set decisivo, para ganarlo por un cerrado 6-4 y adjudicarse el partido en una hora y 46 minutos.

Un decisivo quiebre en el último game selló la cuarta victoria de Fernando González sobre el cemento ateniense, y aseguró la obtención de una medalla olímpica para Chile, logro para el que también resultó decisivo el triunfo de Nicolás Massú ante Carlos Moyá por 6-2 y 7-5.

La alegría de González fue incontenible, pero aún restará un último esfuerzo para luchar por el oro, y será este viernes desde las 10:00 horas (14:00 GMT) en la semifinal ante el estadounidense Mardy Fish (35°), verdugo del ruso Mikhail Youzhny (45°) tras batirlo por 6-3 y 6-4.

Chile estará en el podio olímpico al final de la competencia, ya que en el peor escenario posible -que Massú y González pierdan en semifinales- deberán disputar entre sí la medalla de bronce, mientras que en caso de salir airosos de las semifinales, nuestro país obtendrá una soñada medalla de oro y una de plata.