El alemán Otto Rehhagel, artífice del milagro de Grecia que este domingo se consagró como campeón de la Eurocopa, aseguró que el éxito de su equipo fue la consecuencia lógica del riguroso trabajo que inició hace tres años.

"Esta es la coronación de tres años de arduo trabajo. Los jugadores se comprometieron con una forma de trabajar y ahora recibimos un premio de incalculable valor. Pocos confiábamos en nosotros, pero yo siempre supe de las posibilidades de este grupo", explicó el entrenador.

Rehhagel felicitó a sus jugadores por la entrega en cada partido, quienes afirmó afrontaron siempre como si de una final se tratase.

Por más que se le inquirió, el seleccionador griego no destacó a ningún futbolista en particular.

"Aquí, desde el que más juega al que menos, colaboraron a un éxito. Esto no puede ser nunca un triunfo de uno, es de todos, de una familia", concluyó.

El entrenador, además, se defendió de las críticas por el esquema defensivo que utilizó con su escuadra a lo largo de todo el torneo.

El alemán contestó que un equipo que sólo defiende no gana un campeonato de las dimensiones de una Eurocopa.

Finalmente, Rehhagel no quiso referirse sobre su futuro ni el del equipo griego de cara al Mundial de Alemania 2006.

"Ahora sólo es momento de disfrutar este enorme éxito que seguro habrá colapsado Grecia", sentenció.

Mientras el delantero Angelos Charisteas, el héroe de la jornada al conquistar con su gol la primera Eurocopa para Grecia, declaró que se siente "el hombre más feliz de la tierra".

"Creo que estamos viviendo un momento único. Somos campeones de Europa. Los mejores de Europa. Nos lo merecemos. Soy muy feliz, esto es muy importante", declaró el artillero que juega en Werder Bremen de Alemania.

"Jugando como hasta ahora no podíamos perder la final. Es una experiencia inolvidable. Es el mejor momento de mi carrera", agregó. (EFE)