El mediocampista Zinedine Zidane se convirtió en el gran héroe de la jornada para Francia, que gracias a dos perfectas definiciones suyas -de tiro libre y penal- en los descuentos, logró remontar un encuentro que parecía perdido y batió por 2-1 a Inglaterra en el debut de ambos elencos en la Eurocopa 2004.

Zidane ganó el esperado duelo de figuras de Real Madrid ante David Beckham y se transformó en el verdugo británico, quien falló un lanzamiento penal en el minuto 72 que habría establecido un claro 2-0 a favor de los dirigidos por Sven Goran Eriksson.

Fiel a su estilo, Inglaterra planteó un encuentro basado en el orden defensivo, y con ello logró detener los intentos galos por iniciar la defensa del título obtenido en Holanda-Bélgica 2000 con el marcador a su favor.

Las figuras francesas como Zidane, Thierry Henry, David Trezeguet o Robert Pires no lograron combinar con claridad, y eso se tradujo en que el portero David James sólo debió actuar para controlar un par de centros, pero no sufrió ataques claros en todo el primer tiempo.

Inglaterra apostó al contragolpe y a las jugadas de balón detenido, y un tiro libre sobre el sector derecho del ataque servido por David Beckham con un centro al área, permitió a Frank Lampard ganar por alto y batir con un cabezazo a Fabien Barthez en el minuto 38.

Francia acusó el golpe y se volcó con todo en ofensiva, pero careció de claridad y chocó permanentemente con la zaga británica, que mantuvo el orden para dejar el peligro fuera de su sector.

Beckham falló en el instante decisivo

El segundo tiempo no varió en cuanto al planteamiento de ambos conjuntos, y la jugada más destacada llegó en el minuto 71, cuando Wayne Rooney se escapó en solitario en un veloz contragolpe y fue derribado en el área por Mikael Silvestre.

David Beckham se paró frente al balón y definió con un remate a su izquierda, pero el meta Fabien Barthez reaccionó de gran forma y contuvo el lanzamiento para mantener la cuenta tal como estaba, desbaratando el intento británico por adelantarse por un 2-0 que prácticamente habría sellado el triunfo.

Se pensó en una reacción gala tras el golpe anímico que pudo significar el penal perdido por Beckham, pero el ritmo del encuentro estuvo lejos de cambiar, y David James siguió observando las acciones desde lejos ante la incapacidad de los actuales campeones de Europa para generar jugadas de peligro.

Inglaterra dominaba el encuentro con relativa comodidad, hasta que Emile Heskey cortó un ataque de Claude Makelele con una infracción frontal casi en el borde del área y posibilitó una inmejorable ocasión para los dirigidos por el técnico Jacques Santini.

Luego de realizar una pálida actuación, Zinedine Zidane aceptó la responsabilidad de servir el lanzamiento en el minuto 90, y se despachó un derechazo fulminante que dejó parado a David James, para decretar un agónico e inesperado empate 1-1.

Luego de perder la posibilidad del triunfo en el último minuto, los británicos intentaron asegurar al menos una igualdad, pero un desafortunado pase de Steven Gerrard hacia su portero encontró en solitario a Thierry Henry en el área, y a David James no le quedó otra que derribarlo.

Zidane nuevamente asumió el desafío y definió con maestría para sellar el triunfo en el minuto 92, que permitió a los franceses comenzar con el pie derecho la defensa del título obtenido en 2000.

Estadísticas

Francia 2: Fabien Barthez; Lilliam Thuram, William Gallas, Mikael Silvestre (78' Willy Sagnol), Bixente Lizarazu; Robert Pires (75' Sylvain Wiltord), Patrick Vieira, Claude Makelele, Zinedine Zidane; Thierry Henry, David Trezeguet. DT: Jacques Santini.

Inglaterra 1: David James; Gary Neville, Ledley King, Sol Campbell, Ashley Cole; David Beckham, Frank Lampard, Steven Gerrard, Paul Scholes (78' Owen Heargreaves); Wayne Rooney (78' Emile Heskey), Michael Owen (68' Darius Vassell). DT: Sven Goran Eriksson.

Goles: 0-1 Frank Lampard (38'); 1-1 Zinedine Zidane (90'); 2-1 Zinedine Zidane (92').

Amarillas: Pires, Silvestre (F), Scholes, Lampard, James (I).

Arbitro: Markus Merk (Alemania)

Estadio de la Luz, en Lisboa.