En una confirmación de su gran momento, Fernando González (16°) derrotó por 7-5 y 6-2 al australiano Lleyton Hewit (12°) y dejó a Chile 1-0 en la final de la Copa del Mundo por Equipos de Düsseldorf, Alemania, donde el elenco nacional quedó a un paso de reeditar el título conseguido en 2003 en este mismo escenario.

Se pensó en un partido parejo, y lo fue hasta que González desplegó sus mejores tiros de derecha para mermar lentamente al siempre luchador tenista oceánico.

La arcilla, sin duda, le acomoda al número dos de Chile y este sábado lo demostró con creces, batiendo con autoridad a un ex número uno del mundo, resultado que de paso le permitió igualar 2-2 la estadística de enfrentamientos contra Hewitt.

En el primer set, Hewitt y González no se dieron tregua. Golpe a golpe, ambos protagonistas buscaban mermar a su contrincante, pero lo equiparado del duelo se mantuvo sin quiebres.

Cuando todo hacía presagiar que llegaría el desempate, apareció la contundencia del chileno, quien comenzó a martillar con tiros ajustados y terminó por complicar el tenis del australiano.

Hewitt sintió la presión que puso el nacional y en la instancia decisiva le permitió a González sacar la ventaja. Con 6-5 para el chileno, el ex número uno del mundo salvó cinco puntos de set, pero en el sexto sucumbió ante los mejores golpes de su rival quien se apoderó del parcial por 7-5, en 48 minutos de juego.

El segundo capítulo parecía ser la resurrección del australiano, pero el pupilo de Horacio de la Peña no estaba para sorpresas y frenó las aspiraciones de su antagonista. En el primer juego, el jugador de La Reina evitó dos puntos de quiebre y tomó la ventaja, la cual nunca más perdió.

El oriundo de Adelaida parecía desconcertado y constantemente su raqueta sufría la impotencia de no poder superar al nacional.

Así, en el sexto juego, por fin la superioridad de González se evidenció en la pizarra. Con ventaja de 3-2, el chileno logró el rompimiento y se encaminó casi sin contrapesos hacia el triunfo.

El nacional parecía dispuesto a cerrar cuanto antes el partido, y pese a la lucha de Hewitt lo logró con comodidad. Se puso 5-2, y en el octavo game el australiano volvió a ceder su servicio con una doble falta, para dejar a Chile en ventaja de 1-0 en la final de la Copa del Mundo por Equipos de Düsseldorf.

Fernando González una vez más confirmó su importancia en el equipo nacional, tras ganar los cuatro individuales en que participó durante el campeonato, al igual que el año pasado.

En la edición 2004, González venció al checo Radek Stepanek (59°), al español Alex Corretja (94°), al alemán Tommy Haas (114°) y este sábado a Hewitt.

Ahora será el turno de Nicolás Massú (11°). Si el viñamarino vence a Mark Philippoussis (18°), Chile habrá revalidado la corona en Düsseldorf. Si pierde, todo se definirá en el dobles.