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El bicampeón sudamericano quiere dejar en casa el título de la Regata Chiloé

El chileno Dag von Appen, que en 2005 revalidó en Uruguay la corona subcontinental en la serie J-24, intentará arrebatarle el título a los ostentosos barcos de la categoría IMS, la serie estrella de la prueba madre del velerismo nacional.

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Por Esteban Catalán Muñoz, enviado especial a Chiloé

 

No es algo que salte a primera vista, pero Dag von Appen es chileno. Su apellido, que ya es marca registrada en el velerismo nacional, se ha paseado por aguas extranjeras dejando una larga estela de títulos, como el bicampeonato sudamericano de J-24, una de las categorías presentes en la Regata Chiloé 2006.

 

El también campeón nacional de la categoría optó por partir a las aguas de Punta del Este, en 2005, para revalidad la corona obtenida en Chile en 2004, en una competitiva regata que citó a uruguayos, brasileños y argentinos, los más fuertes del subcontinente.

 

"Fuimos a buscar el primer lugar. Sabíamos que es un poquito más fácil correr de local, uno conoce mucho mejor el lugar, la ‘cancha’, el viento, la corriente…Aunque sabíamos que sería competitivo en Uruguay, logramos defender el título", señaló Von Appen en diálogo con Cooperativa.cl.

 

No obstante, en la Isla Grande Von Appen aspira al título mayor, el de la IMS, que acapara toda la atención en la tradicional prueba náutica.

 

"Somos exactamente la misma tripulación del J-24, que estamos en el velero "Hush Puppies". Es un ‘barquito’ de 27 pies y nuestras expectativas, si las condiciones de viento no son tan fuertes como se han dado hasta ahora, es tratar de estar en punta o entre los tres primeros”, indicó el velerista.

 

No obstante, Von Appen reconoció que los resultados no los han acompañado en los primeros capítulos de la competencia, en donde se han visto relegados a un segundo plano tras los barcos de mayor inversión económica. “El título está un poco lejos”, señaló.

 

"Es muy difícil competir en IMS contra los barcos construidos para esa fórmula, como el "Almacenero’, el ‘Pisco Sour’ o el ‘Maserati’", indicó, haciendo referencia a los tres primeros del certamen.

 

Y es que para el bicampeón sudamericano debe ser difícil acostumbrarse al hándicap (que empareja los tiempos de embarcaciones distintas) de la IMS en vez de la J-24, donde todos los barcos son iguales, navegan igual y el que llega primero gana.

 

“En IMS es más (importante) la posibilidad de comprar el barco indicado, último modelo, para tener más chances de ganar”, agregó.

 

La polémica de los Corum 27

 

Von Appen aún tiene un dejo de molestia por los comentarios sobre el handicap asignado a los tres Corum 27 de la competencia: barcos construidos en 2005, pero que puntúan como si fueran de 1995, porque su diseño es de ese año.

 

"(Las críticas) fueron más allá de lo que debería haber sido, porque la fórmula es una sola y ya está establecido cual es el rating de los barcos. Los Corum es un diseño del año 1995, y es básicamente lo mismo que se construyó en esa época, con mínimas diferencias que están permitidas dentro de la clase", señaló el capitán de “Hush Puppies”.

 

-Además, fueron aprobados en Argentina

-Claro. Argentina tiene tanto o más tradición IMS que Chile y allá fueron medidos, aceptados, corrieron y les fue muy bien, saliendo primeros en el Nacional Argentino de IMS.

 

-De todas formas, frente a "L’Amateur" e "Imaginario", los otros Corum en competencia, ustedes han tenido el mejor rendimiento.

“-Yo creo que somos la tripulación más afiatada. Tenemos la desventaja, eso sí, de que el barco es nuevo para nosotros, porque llegó un par de días antes a Chiloé y no tuvimos la posibilidad de entrenar”

 

El momento del velerismo nacional no tiene dobles lecturas para el velerista. “El 2005 fue espectacular, con varios campeonatos importantes… Se está reflejando el hecho de que llevamos muchos años entrenando y navegando fuerte”, aseguró.

 

Las expectativas siguen en alto para 2006: “La idea es seguir de todas maneras corriendo J-24. Tenemos contrato por un par de años más y como tripulación queremos seguir navegando”. Por mientras, la IMS en la Regata Chiloé aparece con un aperitivo de lujo. (Cooperativa.cl)