Cristián Alvarez, el "Huaso" que se despidió del fútbol con la gloria de un caballero cruzado
El defensa levantó el título y terminó 19 años de carrera profesional, quedando en la historia de la UC y del fútbol chileno.
Cristián Alvarez, con 38 años de edad y un registro de 19 exitosas temporadas en su trayectoria, puso fin a su carrera como profesional y lo hizo con uno de los más grandes honores que puede tener un futbolista: siendo capitán y levantando un nuevo título en el equipo de su vida, Universidad Católica.
Oriundo de Curicó, el "Huaso", como lo apodaron con cariño en San Carlos, llegó a San Carlos de Apoquindo en 1993 y de inmediato marcó presencia, primero en el equipo infantil y después en el plantel juvenil. De hecho, debutó con 17 años en el cuadro titular, en una goleada por 4-1 a Colo Colo en 1997.
En 1999 fue considerado integrante del plantel adulto, pero recién en el cambio de milenio, el año 2000, llegó la consolidación, no solo como titular en la zaga cruzada, sino también por integrar la selección chilena que ganó la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Sydney.
En 2002 llegó la primera alegría con Universidad Católica, coronándose en un campeonato donde su nombre pasó a la historia por un particular hecho: durante el clásico estudiantil ante la U, tuvo la responsabilidad de ponerse los guantes, ubicarse bajo los tres palos y enfrentar un lanzamiento penal, pues a los franjeados no le quedaban cambios cuando fue expulsado el portero, Johnny Walker, por falta en el área.
Lo insólito fue que el "Huaso" atajó el penal de Pedro "Heidi" González, evitando una derrota y jugando de buena forma lo que quedaba de partido.
Convertido en héroe de la UC, Alvarez continuó su periplo en San Carlos hasta 2005, momento en que decidió cruzar la Cordillera.
River Plate y una cruzada por el mundo
En Argentina, Alvarez fichó por River Plate, ilusionando a los "Millonarios" con la posibilidad de marcar una época como otro chileno, Marcelo Salas. Sin embargo, la regularidad nunca estuvo de su parte y sólo fue titular en algunos partidos.
Esa misma inconsistencia lo llevó a retornar a Universidad Católica en 2007, aunque la situación del club era distinta a cuando partió, por lo que decidió emigrar de nuevo, aunque con variados (y exóticos) destinos.
Entre 2006 y 2011 pasó por Beitar Jerusalén, Jaguardes de Chiapas y Universitario de Lima, su último club antes de regresar de forma definitiva a la UC.
En 2011, con su experiencia, y jugando tanto como lateral derecho y zaguero central, se convirtió en piea clave dentro de la cancha y el camarín, como gran referente y voz importante de los cruzados.
Volvió a saborear el triunfo en 2016, levantando tres copas como capitán: Torneos de Clausura, Apertura y la Supercopa de Chile. "Ningún huevón merece esto más que yo", exclamó a viva voz el esforzado defensor.
No obstante, a medida que sumaba títulos, también llegaban los años y, entendiendo la filosofía cruzada, de dar paso a los jóvenes, tal como lo vivió él, empezó a tantear el retiro.
¡El destino nos ha vuelto a juntar! Nacimos en la UC y terminaremos en nuestra casa. Bienvenido @MiloMirosevic pic.twitter.com/QzWIDeBAoQ
— Cristian Álvarez (@Cris4Alvarez) 29 de julio de 2016
En 2017 lo anunció, viendo como su amigo y contemporáneo Mirosevic ya no jugaba más. Sin embargo, optó por seguir un año más y el destinó le otorgó una alegría más, porque pudo inscribir su nombre en otra estrella y reforzar su condición como uno de los ídolos más grandes de la historia cruzada.
Palmarés
Selección chilena
- Medalla de bronce, Juegos Olímpicos Sydney 2000
Universidad Católica
- Torneo Apertura 2002
- Torneo Clausura 2005
- Copa Chile 2011
- Torneo Clausura 2016
- Supercopa 2016
- Torneo Apertura 2016
Beitar Jerusalén
- Liga primera división 2007-08
- Copa de Israel 2008
- Copa de Israel 2009