Reinaldo Rueda: La tensión y el débil comportamiento arbitral desenfocó a Chile

El entrenador de la selección chilena, Reinaldo Rueda, reconoció que su equipo "perdió la focalización" durante el partido contra Argentina por el tercer puesto de la Copa América y responsabilizó al juez Mario Díaz de Vivar por su bajo nivel de manejo.

"La tensión y el débil comportamiento arbitral desenfocaron a Chile del juego, ese fue el principal error que cometimos y propició el 0-1, justo en una ingenuidad que se presentó también contra Perú y que acá se volvió a dar", señaló.

"Con esa situación y lo demás, perdimos la focalización en el juego y lo que sabemos hacer. Es una pena que se diera esa situación. Cuando se concentró en jugar, Chile fue otro y ya no alcanzó para lo que queríamos", continuó el DT de la Roja.

Luego, el DT insistió en sus críticas al árbitro, principalmente por la determinación de expulsar a Gary Medel y Lionel Messi: "Es un situación normal en la disputa de un duelo. Se palabrean y listo, no es mi especialidad y tengo un gran respeto por los áritros, pero era cuestión de manejo. Un buen arbitraje se distingue por terminar con los 22 hombres en la cancha", postuló.

"Es una pena que suceda, en una situación que se podría manejar de otra forma no permanezcan los dos conjuntos completos, que el mejor jugador del mundo sea expulsado, creo que es una situación triste", indicó.

En esa línea, Rueda complementó que en un duelo de la tensión que exhiben usualmente los partidos entre Chile y Argentina "requería un mejor comportamiento del árbitro y los jugadores. Por ahí pasa todo".

De igual manera, el colombiano hizo un positivo balance del torneo realizado por su equipo: "Si lo miramos por cómo se enfrentó la Copa América, por lo del semestre anterior de muchos jugadores, por lo que mostró el equipo en la cancha, es positivo; entramos a esta Copa América como los sextos de Sudamérica, por quedar fuera del Mundial".

Sobre la opción de jugar por el tercer puesto expresó que "esta instancia no la merecíamos, Chile cometió un pecado que fue ilusionarnos por el fútbol que expuso, eso hizo soñar con una final".