Palestina agradeció a Argentina la cancelación del amistoso con Israel
La Asociación de Fútbol de Palestina remarcó que la Albiceleste "no debe prestarse para convertirse en una herramienta política".
La Asociación de Fútbol de Palestina agradeció la cancelación del amistoso entre Argentina e Israel previsto para el próximo sábado en Jerusalén.
"Las noticias que estamos recibiendo son que se canceló, pero aún no tenemos ninguna confirmación oficial", dijo a EFE la directora internacional de la Asociación de Fútbol de Palestina, Susan Shalabi.
"De confirmarse, he de decir que tiene mucho mérito que el equipo argentino haya decidido no prestarse para convertirse en una herramienta política", aseguró, satisfecha.
Para Shalabi, este es "un buen ejemplo de separación de política y deporte y de cómo no permitir a los políticos imponer su agenda".
"Es algo por lo que les tenemos que agradecer a los argentinos", aseguró.
Esta noticia fue confirmada poco más tarde en declaraciones de Hugo Moyano, vicepresidente segundo de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), quien aseguró: "Me parece bien que se haya suspendido el partido de Argentina con Israel".
"Se ha hecho lo correcto, no valía la pena. Lo que pasa en esos lugares, donde matan tanta gente, como ser humano no se puede aceptar de ninguna manera. Las familias de los jugadores estaban sufriendo por las amenazas", declaró Moyano a una radio local.
En Israel, el Canal 55 de deportes y el programa "Vida en la Noche" del Canal 12 israelí, señalaron que la cancelación se debe a las presiones que han sufrido por parte de los palestinos y su entorno, que veían en el amistoso una muestra apoyo a la ocupación israelí acudir en estos momentos a jugar en Jerusalén.
Este martes, la Asociación de Fútbol de Palestina anunció que de llevarse a cabo el amistoso haría campaña entre los países árabes y musulmanes para impedir que Argentina acoja el Mundial de Fútbol 2030, tal como pretende con una candidatura conjunta con Uruguay y Paraguay.
Estaba previsto que el partido se celebrase en Haifa, pero el lugar fue cambiado por decisión de las autoridades israelíes, que en estos momentos promocionan la aceptación internacional de Jerusalén como su capital, en contra del consenso histórico hasta ahora de no reconocerla como tal puesto que su parte oriental está ocupada a los palestinos desde 1967.
Shalabi advirtió de que Argentina no debía permitir "ser utilizada como herramienta para blanquear la ocupación israelí" y explicó que "venir a Jerusalén en este momento en el que todo el mundo está enfadado con lo que ha hecho (Donald) Trump (trasladar a la ciudad la Embajada de EE.UU. de Tel Aviv) es muy grave", aunque no se opuso a que el partido se jugase en otra ciudad.