Javier Castrilli: Lo del penal no cobrado a Chile fue un golpe a la credibilidad de la FIFA

El ex árbitro argentino Javier Castrilli, conocido por su rigidez a la hora de pitar, conversó con Al Aire Libre en Cooperativa y en el diálogo refrendó sus opiniones en Twitter, argumentando que el penal no sancionado a Chile en el duelo ante Portugal y que ni siquiera fue revisado por el VAR es un golpe muy duro a la credibilidad que la FIFA está intentando mostrar con el uso de la tecnología.

"Me quedé muy preocupado, porque precisamente uno quiere la tecnología. Yo la quiero, pero no la tecnología utilizada de esta manera y tan aviesamente, ocultando a los ojos del mundo lo que había ocurrido. Fue un golpe muy bajo a la credibilidad que la FIFA debiera tener y esa credibilidad se ve desgastada, se ve puesta en duda por la sospecha que se deja ver en la omisión del VAR en una jugada tan clara, que termina otorgándole una ventaja deportivo a Portugal y poniendo en riesgo la clasificación de Chile a la final", dijo el ex referí.

Y quien fuera conocido como el "Juez de Hierro" fue más allá dado que avisó respecto a una intención manifiesta de perjudicar a equipos sudamericanos.

"Mi preocupación fue aumentando a medida que fui tomando contacto con personas que están allá cubriendo la Copa Confederaciones, que me transmitieron que uno de los tres árbitros del VAR era el uzbeco Ravshán Irmátov, y ahí me cerró, porque él ha perjudicado enormemente a Uruguay en 2010 (en semifinales), impidiendo que llegara a la final por los errores de él. Hay un común denominador y estos antecedentes hay que difundirlos, advertir a los dirigentes y ahora Chile, por haber triunfado, tiene toda la autoridad para ser escuchado", explicó.

Añadió que "quienes dicen representar los intereses de Conmebol tiene que estar primeros a la hora de la designación de los árbitros para que ningún equipo sudamericano se vea perjudicado por normas extrañas, porque casualmente son en contra de las selecciones sudamericanas. Chile ayer ganó y se repuso de esa ventaja, y con el triunfo en la mano, tiene autoridad para protestar y advertir: 'Cuidado señores, se viene final y se viene otro europeo'", concluyó.