Carlos Chandía retoma su labor como alcalde: Los doctores dicen que lo mío fue un milagro
El ex referí vuelve este martes a su trabajo como alcalde de Coihueco.
El ex árbitro Carlos Chandía, hoy alcalde de Coihueco, contó detalles de su convalecencia luego de un accidente de tránsito que lo tuvo en coma por un par de meses y aseguró que no recuerda nada del accidente, y que los doctores que lo atendieron le aseguran que su recuperación es un milagro.
"No recuerdo nada, absolutamente nada. Todo me lo ha ido contando mi señora, Yeniffer", explicó el otrora mejor referí del fútbol chileno en diálogo con El Mercurio.
"Esa mañana iba rumbo a la alcaldía y mi camioneta se pegó un leve salto y había escarcha, hielo en la carretera, muy húmedo el terreno. Y tratando de hacer el quite a un auto que venía de frente, mi reacción fue tirarme a la orilla. Me deslicé y me fui hacia un costado y me di varias vueltas", añadió Chandía, quien da cuenta de las conversaciones que ha mantenido con los médicos.
"Me dicen que mi recuperación fue un hecho muy rápido, que fue algo muy raro para ellos, inédito, quizás la actividad que hacía antes me dio la fuerza para sostener tanto impacto y tanta violencia. Eso me permite estar conversando con usted. Solo tengo gratitud para la gente de la Mutual, han hecho todo por recuperarme y para que no queden indicios. El accidente pudo ser fatal. Las imágenes que me muestran de la camioneta son terribles, me siento afortunado también porque la recuperación ha sido ágil con la gente de la Mutual. Los doctores me dicen que lo mío fue un milagro por cómo quedó la camioneta y por cómo llegué yo al hospital. Les agradezco a ellos y también a Yeniffer, mi señora, que ha estado en todas y me ha tenido una paciencia de oro, como también Gonzalo, Valeria y a Fabio Bruno (hijo de Yeniffer)", contó el hoy jefe comunal de Coihueco, de donde es oriundo y donde este martes retoma sus actividades.
"Estoy ansioso por volver a trabajar y para poder sentirme útil y responder a toda la gente de la comuna que confió en mí y volvió a sufragar por este individuo. Mucha gente me ha mandado mensajes y quiere darme una buena bienvenida. Mucha gente me pide visitas, pero les digo que esperen un poco, déjenme tomar el timón de nuevo y con más calma nos iremos comunicando. Antes andaba a full y ahora iré más suave. Si bien hablo un poquitito más lento que antes, mi cerebro anda rápido y funciona a mil", dice.