Atlético Nacional superó en la agonía a Rosario Central por 3-1 (3-2 en el global) y avanzó a las semifinales de la Copa Libertadores 2016, aunque el final del encuentro se empañó con una dura polémica.

El duelo comenzó de gran manera para el elenco donde milita el ariete Marcelo Larrondo (que no fue citado por lesión), debido a que Marco Ruben (9'), mediante tiro penal, abrió la cuenta para los trasandinos.

Justo antes del entretiempo apareció la figura del ex volante de Colo Colo Macnelly Torres (45+1'), quien definió en área chica para emparejar las acciones en el Estadio "Atanasio Girardot" de Medellín.

La segunda parte fue muy peleada, gracias a que Alejandro Guerra (51') anotó el 2-1 para los "verdolagas" y los dejó a un tanto de la clasificación, por lo que el cuadro "canalla" luchó para que la ventaja se mantuviera.

A los 90+1' llegó un momento clave, debido a que Esteban Burgos fue expulsado por doble amonestación, lo que permitió que el elenco colombiano tirara todas sus fichas al ataque para lograr el tanto del triunfo.

Finalmente, la apuesta del elenco de Reinaldo Rueda dio resultado debido a que Orlando Berrío (90+5') empujó un balón en área chica para desatar la locura en las gradas del "Atanasio Girardot".

Los problemas comenzaron en este punto, debido a que Berrío le gritó el gol, junto con otro compañero, al arquero Sebastián Sosa de Rosario Central, lo que provocó que varios jugadores argentinos lo persiguieran por la acción. El goleador finalmente vio la roja por la acción, junto con el defensa Damián Musto, quien le propinó una patada.

Luego, antes del pitazo final, Giovani Lo Celso también fue expulstado por darle un duro manotazo a un jugador de Atlético Nacional, quienes finalmente terminaron celebrando el paso a semifinales.

Por un cupo en la final del torneo continental, el cuadro colombiano deberá jugar ante Sao Paulo de Eugenio Mena.

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