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La columna de Pelotazo: El fútbol chileno no quiso la igualdad

El recuerdo a una elección de la ANFP que estuvo condimentada por una idea que no gustó a algunos equipos.

La columna de Pelotazo: El fútbol chileno no quiso la igualdad
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Retrocedamos el calendario al 4 de noviembre de 2010. Ese día hubo elección presidencial en la Asociación Nacional de Fútbol Profesional. El candidato Harold Mayne-Nicholls iba por la reelección y Jorge Segovia lideraba la lista opositora.

Todo parecía miel sobre hojuelas para que el mandamás que trajo a Marcelo Bielsa a la Roja se repitiera el plato, hasta que a mediados de ese año se le ocurrió una revolucionaria idea: repartir de forma igualitaria los excedentes del Canal del Fútbol.

Puso en el tapete la palabra "igualdad", que saca ronchas a algunos.

Eso provocó que aparecieran de inmediato tres clubes que no quisieran su continuidad: Colo Colo, Universidad de Chile y Universidad Católica. Lógico, no estaban dispuestos a perder el dinero que les estaba llegando hasta ese momento sin importar sus campañas.

Eso provocó un Consejo de Presidentes previo a la elección donde se aprobó la forma de repartir las ganancias del CDF: albos, azules y cruzados se quedarían con 26 por ciento de los excedentes, los clubes de la Primera B tendrían el 14 por ciento y el resto de los equipos tendrían el restante 60 por ciento.

Fue la "primera derrota" de Mayne-Nicholls. La segunda, la elección de noviembre. Segovia venció 28-22 en una votación donde hubo otros clubes aparte de los tres más populares que apoyaron al directivo de Unión Española.

Razones para apoyar pueden haber tenido muchas, pero la principal fue la del CDF. Sólo mencionar que si se dividía en partes iguales el monto los otros clubes de Primera División recibían un 3,1 por ciento de la ganancia, y con lo aprobado, un 4,6 por ciento.

Con el cambio sólo salían beneficiados los equipos de la Primera B, ya que sólo les llegaba un 1,07 por ciento del botín. Y si se aprobaba la idea de Mayne-Nicholls, triplicaban sus ingresos.

En ese contexto tan seguro parecía el triunfo de Segovia, que Marcelo Bielsa llamó a conferencia de prensa la tarde anterior a la elección. "Yo el día que Harold dejé la conducción o termine su gestión, yo abandonaré la tarea", comentó el técnico argentino. Fue una presión que no tuvo éxito.

Finalmente, Segovia ganó y no pudo ejercer el mandato por incumplir un inciso del reglamento de la ANFP, debido a que en su calidad de presidente y dueño de Unión Española firmó un contrato entre el club y la Universidad SEK, donde también era dueño.

Intentaron derogar el artículo 164, letra i) para que el directivo pudiera competir en una nueva elección y no se pudo. Así entró al ruedo Sergio Jadue, que venció a Ernesto Corona. Y después, la historia que conocemos.

Lo cierto es que cuando pudimos ser iguales no quisieron. Que no te lo maquillen distinto.